Resumen

Las concentraciones de nutrientes en las hojas de las palmas de aceite indirectamente proporcionan un indicador sobre el estado de sanidad de la palma. Esta información será utilizada por los agrónomos para formular los requerimientos de fertilizantes adecuados para aplicar a las palmas y así obtener buen crecimiento y alta productividad. La mayoría de las investigaciones sobre nutrición de la palma de aceite en Malasia fueron realizadas en el periodo comprendido entre 1960 y 1990, utilizando palmas derivadas de materiales de siembra DxP Avros. Estos trabajos sobre nutrición proporcionaron una referencia para las concentraciones óptimas de nutrientes de las hojas como estándar de comparación para la industria palmera. Con el correr de los años, en esta industria surgen materiales de siembra de diversos orígenes, más nuevos y de más alto rendimiento y ahora hay datos disponibles que muestran algunas diferencias en las concentraciones de nutrientes en las hojas en comparación con los datos más antiguos. La distribución de las lluvias en las zonas del interior de Malasia es por lo general desigual, y se sabe que afecta el crecimiento y la producción de la palma de aceite. Se dispuso un ensayo de riego en 1999 en el Centro Tun Razak para Servicios Agrícolas, Jerantut, Pahang, Malasia (3° 52’ 55” Norte, 102° 43’ 41” Este). Un estudio extenso y simultáneo, publicado recientemente, mostró que las concentraciones de nutrientes en las hojas de la palma de aceite en la etapa productiva ascendente (2004-2007, 5-8 años después de sembrada) fueron afectadas por el genotipo, el riego y el terreno. Por tanto, los principales puntos para discutir en este trabajo son el entendimiento de la eficiencia de la nutrición de la palma en relación con los materiales de siembra y el riego en la etapa productiva principal (2008-2011, 9-12 años después de sembrada). Se detectaron variaciones de las concentraciones de nutrientes en las hojas en cuatro materiales clonales de palma de aceite, a saber, Avros, Yangambi, La Mé y Nifor, así como dos híbridos DxP Yangambi, cultivados en campos aterrazados y no aterrazados, sometidos a condiciones de riego y no riego. En las condiciones actuales favorables para el cultivo, no se presentaron diferencias significativas en los valores de nutrientes en las hojas para las condiciones tanto del terreno como de riego.