@article{Owen B._1995, title={Características físico-químicas del suelo y su incidencia en la absorción de nutrimentos, con énfasis en el cultivo de la palma de aceite}, volume={16}, url={https://publicaciones.fedepalma.org/index.php/palmas/article/view/461}, abstractNote={El análisis físico-químico de los suelos es indispensable para la selección de los lotes para la siembre de palma de aceite y para conocer y entender el efecto de la aplicación de enmiendas y fertilizantes, a través del tiempo, en la producción; este análisis se debe usar como complemento para el diagnóstico de los requerimientos de fertilizantes y cuáles fuentes usar. El déficit hídrico cambia los requerimientos de los nutrimentos de la palma, especialmente en el K y B. Las principales propiedades físicas de los suelos que influyen en la producción de la palma de aceite son: pendiente, textura, estructura, consistencia, drenaje, profundidad efectiva, nivel freático e impedimento al crecimiento de la raíz. Todos estos factores controlan la retención de agua y la aireación. La palma de aceite requiere de un nivel óptimo de oxígeno en el suelo. El oxígeno está controlado por el agua en el suelo, ya que su contenido es inverso al del agua. El factor limitante en la producción es la falta de oxígeno y no el exceso de agua. Las propiedades químicas que influyen en la penetración y absorción de los nutrimentos son el pH, la CIC (capacidad de intercambio catiónico) el contenido de materia orgánica y arcilla) y el tipo de arcilla. Además, la materia orgánica influye sobre algunas propiedades físicas, suministra y hace disponible N, P, S y algunos micronutrimentos. Los factores que inciden en la disponibilidad de los nutrimentos son: el material parental, la humedad del suelo, el pH y la concentración de los elementos en el suelo. En cuanto al aluminio (AL) la palma tolera un 80 por ciento de saturación; este elemento interfiere con la absorción de P, Ca y Mg. Los suelos apropiados para palma de aceite deben tener entre 2-8 por ciento de la materia orgánica, lo que equivale a 0 ,1 y 0,4 por ciento de N. Existe interacción entre el N y el S. El contenido de fósforo (P) en el suelo debe ser mayor de 20 ppm (Bray II) y hay interacción con N, K, Cu y Zn. La saturación de bases debe ser mayor del 20 por ciento y su distribución óptima en me/100 g es: Ca=0 1,0, Mg=0 0,4 y K=-. 15-0,20. Entre ellos existe interacción. Además el Ca interactúa con B, Cu, Fe y Mn. Se reportan unos niveles críticos para los elementos menores. La continua o alta aplicación de enmiendas fertilizantes induce a las deficiencias de los micronutrimentos. En primera aproximación se reportan los niveles críticos en el suelo y la cantidad de fertilizante necesario para aumentar el contenido en el suelo para cada rango. Además se presentan factores de conversión de kg/ha a kg/palma según la edad.}, number={1}, journal={Palmas}, author={Owen B., Eric J.}, year={1995}, month={ene.}, pages={31–39} }